domingo, 25 de septiembre de 2011

Platón, Kant y Gronn

Vamos a revisar los conceptos antiguos, contemporáneos y modernos, estas tres tendencias en sus épocas fueron muy influyentes y desde luego, es tarea de rescatar y/o plasmar sus aportes en la actualidad.

Platón en La Republica, nos introduce una verdad, la cual comparto en su totalidad, en donde, “las diferentes artes no ordenan lo conveniente para ellas mismas, sino para otros” esto es llamado al buen servicio, con ahínco y coraje, en función a las instituciones públicas o privadas y/o naciones. Además aclara, que una generación bien formada y educada proporcionará mejores padres para la próxima. No cabe duda, que la educación es pilar para la formación de líderes. En los siguientes diálogos, Sócrates en el Libro VI de la Republica, esboza un ideal que en la actualidad se ha visto avasallado en su aplicación en la gestión pública, refiriéndose que el gobierno, no se confiará a ciegos conductores de ciegos, sino solamente a los que posean ideales claros; aunque se ha de procurar también que no les falte experiencia”. Esto es la sustancia del estudio.

Kant en la Ilustración, nos regala un aprecia, la cual refleja un falta de ejercitación del conocimiento debido a varios factores: pereza, interés, cobardía, desanimo, etc. Comulgo con Kant, en la falta de tomar la iniciativa e inclusive , con sólo poder pagar, no tengo necesidad de pensar: otro tomará mí puesto en tan fastidiosa tarea. Esto es cotidiano en muchos departamentos y a niveles de gobiernos, algunos políticos dicen: “pospongamos está ley para que el otro gobierno tome medida sobre el tema”, esto es una falta de ética en el ejercicio público.

En el caso de Gronn nos habla de una cambio de liderazgo de un liderazgo administrativo a un transformativo, en donde ambos tienen sus pro y contra.

1. Desarrollo

No cabe duda, que para Platón no todas las personas poseen el don del liderazgo. En La República de Platón, lo deja muy claro, en su dialogo del Libro VI, “el gobierno, no se confiará a ciegos conductores de ciegos, sino solamente a los que posean ideales claros; aunque se ha de procurar también que no les falte experiencia”. Es necesario amalgamar una robusta formación académica complementada con experiencia, con el objeto de desarrollar confianza y maduración en el ejercicio de la gestión, lo cual garantiza una toma de decisiones correctas.

Según Platón en sus diálogos hace referencia que no basta el método, que se aplique generalmente, de definir las tres virtudes en la relación con las tres facultades del alma , el intelecto, los afectos más nobles, y los apetitos o pasiones. El conocimiento más elevado es por medio del bien, siendo la base de la ciencia, la ética y la política. La ética para Platón es importante, a través del bien común se armoniza el orden social justo, no existe grupo favorecido sino lo que prevalece el interés común.

Para llegar a desempeñar un liderazgo, se debe previamente realizar un proceso de aprendizaje, debe de tener ideales claros, se debe de pasar de un estado sensible a uno asequible por medio del intelecto.

Continuando con el diálogo de Platón en Libro VII, Sócrates plantea una educación estructurada para desarrollar la razón del individuo, sirviendo de preparación para la comprensión del mundo racional. Está preparación inicia desde la infancia hasta la edad madura, a través de la ciencias exactas hasta las ciencias sociales y filosóficas. A mi criterio este tipo de liderazgo no es viable para la actualidad se debe de complementar con otros modelo que utilicen no solamente lo racional sino lo emocional-inteligencia emocional-.

Immanuel Kant en su artículo ¿Qué es Ilustración?, nos regala una frase pragmática, ¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! Kant hace una exhortación, a dejar la falta de valor y decisión para servirse uno mismo, siendo esté la causa más importante de la minoría de edad. Otras causas son la pereza y la cobardía de asumir cada uno la responsabilidad de poner en marcha la propia capacidad racional del saber y del actuar, en muchas ocasiones dejamos que los medios informativos, los políticos, las jefaturas, los vecinos, piensen por uno mismo e inclusive muchas decisiones son influenciadas por estos terceros.

Este tipo de liderazgo diverge con el de Platón, para el líder debe servirse del propio entendimiento, solamente exigiendo libertad de hacer uso público de la propia razón y para los filósofos tienen que ser gobernantes o los gobernantes filósofos, sin embargo en el diálogo se advierte de las tentaciones que puede sufrir el filósofo: la riqueza, la belleza, etc., el halago de la multitud.

Oigo exclamar por doquier: ¡no razones! Ahora bien, el uso público de la razón, es el único que puede producir ilustración en los hombres, sin embargo en ocasiones el gobierno dirigirá la nación y los ciudadanos van a razonar, pero debe de obedecer.

Muchos de los obstáculos para alcanzar un liderazgo, se pueden resumir en dos: la pereza y la decisión de razonar. En la actualidad, los ciudadanos está programados para hacer lo mismo-rutina laboral-, sin tener la curiosidad de indagar otras maneras de mejorar los procesos, deja esa tarea en manos de los tecnócratas que en muchas ocasiones, no tiene la certeza de las oportunidades de mejora, sin embargo es más fácil como lo indica ¡Es tan cómodo ser menor de edad!

El liderazgo es un tema muy mayúsculo, en donde existe muchas tipos, unos más inspiradores que otros, sin embargo la mayoría tiene su aporte, en la formación de los líderes del hoy- del hoy, por qué los ocupamos urgentemente en nuestras naciones-.

El liderazgo carismático es uno de ello, Max Weber define “el liderazgo que descansa sobre una dedicación excepcional a la santidad, el heroísmo o sobre el carácter ejemplar de una persona individual, y sobre patrones normativos o sobre ordenes reveladas u ordenados por él”. El carisma se ha convertido en una manera instrumental para lo transformante de culturas y las organizaciones. Además, continúa la autoridad carismática por consiguiente, es la legitimidad personas excepcionales concedidas. Las dos tendencias contemporáneas más importantes: el liderazgo transformativo y administrativo.

El liderazgo carismático, induce a sumisión y a un empoderamiento del seguidor. Esto es sumamente importante para un gobernante y/o líder, ya que en situaciones de crisis los seguidores, van a estar más receptivos. Además, creo que las personas carismáticas tienen la capacidad de descodificar ideas complejas en mensajes simples “tengo un ideal y/o sueño”, esto permite que desarrollen una visión a largo plazo. Además inspiran confianza y tiene una seguridad de sí mismo, generando compromiso de sus seguidores.

Ahora vamos a deliberar ideas sobre las diferencias del liderazgo administrativo y transformacional. Claramente ,se indica “…todo el mundo es capaz de ejercitar liderazgo efectivo en los papeles que conllevan responsabilidad de liderazgo, siempre que aprecian el papel y… (Jacques y Clement, 1997:7)”. Para que el líder sea capaz de trabajar efectivamente con sus subordinados y pares y pueda hacer se muevan en la misma dirección para el logro efectivo de las metas deseadas. El liderazgo transformacional, está fundado por los valores, creencias y cualidades del líder y no en un proceso de intercambio de entre líder y seguidor. Por otra parte, para determinar las funciones de trabajo que la organización precisa, es necesario que líder entienda y este comprometido con su misión y visión , sin embargo los lideres transformacionales son capaces de emprender cambios en la visión, la estrategia y la cultura de la organización.

2. Conclusión

Estamos claros con La República de Platón, no todas las personas poseen el don del liderazgo. Es necesario tener una amplia educación y en paralelo una experiencia que garantice decisiones bien tomadas, no precipitadas, y en peores casos efusivas sin criterios por falta de intelecto- es frecuente en nuestros países latinoamericanos esos escenarios-. Además el liderazgo según Platón, debe de tener ideales claros, objetivos alcanzables y cero demagogias.

No solamente debemos de cultivar el intelecto, sino también estar propenso a cuidarse de los obstáculos, que con el tiempo de gestión emergen, debido a un nivel de conformismo, en donde es difícil vencer la inercia de razonar y tomar decisiones, dejándose obscurecerse por la pereza y falta de decisión. Estas dos causas que hace hibernar a nuestros líderes y/o políticos, repercutiendo en altos costos en la ejecución de proyectos, leyes ambiguas y/o mal planteadas, conflictos sociales por falta de políticas, etc. Kant nos exhorta a usar públicamente nuestra razón para salir de las cavernas que privan a la innovación, la creatividad, competitividad de nuestros pueblos.

Y por último, Gronn nos esboza dos tipos de liderazgo, los cuales tienen pros y contras, sin embargo de los dos hay que aprender. En mi opinión debemos de tener de ambos, es sumamente necesario tener contacto con los seguidores y/o colaboradores, debemos de escuchar sus necesidades, ideas, etc., esto le da seguridad y confianza entre el líder y el seguidor. Sin embargo, también es fundamental inspirar, ganar respeto y confianza. Delegar correctamente y tener un grado de sumisión, esto garantiza que es una circunstancia de crisis, se tiene un ambiente receptivo-abierto-. En fin, es necesario concordar con las ventajas, beneficios, experiencias, etc., de las lecturas y plasmarlo en acciones, con el objetivo de mejorar las condiciones de las instituciones en donde nos desempeñamos.

martes, 20 de septiembre de 2011

Liderazgo ético: Toma de decisiones

En la actualidad hemos presenciado en toda las latitudes, actos de corrupción; ejecutivos y políticos seducidos por los placeres terrenales, han provocado magnos escándalos con pérdidas monetarias e imagen política y corporativa. Repercutiendo, en descrédito y desconfianza en el caso de los accionistas, y en las naciones un aumento vertiginoso en brechas sociales, desvirtuando el principio del bien común.
Toda corrupción tiene un detonante primordial y es la falta de liderazgo ético, mala toma de decisiones y mal manejo de organizaciones y/o países.
La ética es una palabra que encierra mucho, pero difícil de explicar. La ética es el pilar de muchos conceptos actuales como es el trabajo, las organizaciones, la política, etc. Ayuda a tomar decisiones, a formar empresas, a interrelacionarse y sobre todo a formar humanos más íntegros.
Es cotidiano por lo medios noticieros ver y escuchar titulares como; “…los ex presidentes de Costa Rica, fueron condenados a 3 años, casa por cárcel…”, “…los préstamos inmobiliarios en USA, han provocado la bancarrota de bancos internacionales, generando crisis económica en todo el orbe…”, “Alcatel sobornó a los ejecutivos de una empresa de electricidad costarricense…”, estas son noticias diarias en todo el mundo e inclusive para muchas latitudes se han hecho normal. ¿Estaremos viviendo épocas post-ético? En muchas ocasiones sí. Los dobles discursos y las falsas identidades de los “lideres”, han minado la ética.
En mi opinión la responsabilidad de la decisión pública recae a la autoridad pública bajo gobiernos locales, instituciones, etc., cuyos ejecutivos son los arquitectos en diseñar las organizaciones y la ejecución de dichas políticas que se realizan, por medio del funcionarios públicos, figuras importantes en donde la ética e integridad, son los hilos conductores a su actuar. Debemos de recalcar que la integridad, amalgama el decir, el pensar y el actuar del funcionario. Siendo la responsable en determinar quiénes somos, y como responderemos, ante una encrucijada y/o conflicto, en donde debe prevalecer el bien común y la justicia.
Ahora bien, ¿qué papel juega la mayoría, en las decisiones públicas? El papel es significativo pero no protagónico. Si bien es cierto el pueblo escoge a sus gobernantes, la opinión no es determinante en aspectos éticos por varias razones, la mayoría está pobremente informada, la toma de decisiones democráticas son vulnerables para el antojo y las características del liderazgo deben ir acompañadas por expertos y no por la mayoría.

Cuál es la ética para tomar decisiones?
Un tema coyuntural en la actualidad, que ha sido discordia en nuestras mesas de juntas es la toma de decisiones, cuyo modelo racional describe como debe de conducirse los individuos para maximizar de algún resultado, a título personal a fallado sino lo fusionamos con fundamentos éticos.
Uno de los fundamentos que el líder ético, debe de acoger en su gestión, es el bien común, el cual debe considerar principios morales básicos como: Bien particular y bien común no se contraponen; la igualdad de los particulares ante el bien común; limitaciones de los derechos de los ciudadanos ante las demandas del bien común; la gradualidad en la aplicación del bien común, el bien común abarca a todo el hombre; los valores concretos que integran el bien común; el bien común debe respetar la ley natural y por último el bien común y el bien posible.
Si bien es cierto, el bien común es un factor primordial en la toma de decisiones, a la misma vez, puede ser una trampa si se usa de una manera subjetivamente y proactivamente, por lo cual el líder ético, debe tener claro que el bien común, se usa en casos menos riesgosos y evitar la creencia y victoria personal subjetivas.
El líder ético debe de tener tres criterios fundamentales a tomar una decisión. El primero es el criterio utilitario cuyo objetivo es brindar el máximo bien al mayor número de personas. El segundo criterio es centrarse en los derechos, significa respetar y proteger los derechos básicos del individuo y el tercer criterio es enfocarse en la justicia. Y otro criterio primordial es la objetividad siendo la llave en la toma de decisiones.
Por objetividad, se entiende en Durkheim y Weber la actitud del científico de separarse de la realidad social lo suficiente para que los sentimientos, las preferencias, en fin, la subjetividad del sociólogo, no influya. Ahora bien, como anteriormente se ha expuesto no es recomendable solamente con bien común, religión, las leyes, tomar decisiones éticas, también es fundamental la objetividad y la justicia para generar directrices en las organizaciones. Desde luego, esto no es un trabajo fácil, sin embargo la imparcialidad realiza un trabajo elemental, de lo contrario la objetividad no dará frutos. Resulta evidente la conexión entre la imparcialidad y la justicia. Resulta difícil pensar en un resultado justo que no sea imparcial.
En fin, el correcto uso del liderazgo ético, va a generar réditos a las organizaciones, a través de: una ventaja competitiva, una retención de capital humano, un sano ambiente laboral, la reputación e imagen corporativa, una trayectoria empresarial que repercuta hacia una robusta confianza.